EL CORREO.
La Federación de Familias Numerosas de Euskadi (Hirukide) ha valorado positivamente el paso dado por el Gobierno vasco para incrementar las ayudas a la natalidad con 200 euros por niño y mes durante sus primeros tres años de vida. «Es un buen comienzo», apunta su directora, Natalia Díez-Caballero. No obstante, esta entidad espera que haya más medidas para avanzar en el camino correcto. «Tenemos que mirarnos en otros países europeos donde hay una facilidad y un soporte mucho mayor por parte de las instituciones públicas».
En este sentido, Hirukide también pone el acento en la necesidad de que las nuevas ayudas se trasladen a las familias que ya cuentan con hijos mayores de tres años. «Esto es muy importante porque los gastos son bastante elevados más allá de la edad que viene fijada en el nuevo proyecto», insiste Díez-Caballero.
Para Hirukide no todo es una cuestión de dinero. «Estas aportaciones son importantes pero está claro que no lo son todo», apunta su directora. «Hay parejas que deciden no tener hijos por una cuestión de conciliación de su carrera y su desarrollo profesional». Es decir, hay vascos que tienen recursos económicos suficientes para emprender la aventura de la maternidad pero que necesitan de otro tipo de colaboración para lanzarse. «Estamos hablando de medidas para el cuidado de los pequeños, de permisos, de licencias y de organizar y financiar actividades para los pequeños en todas las épocas del año no lectivas, no solo en verano».
Díez-Caballero pide «no bajar la guardia». «No podemos quedarnos en estas ayudas, hay que ir más allá, por ejemplo, también se puede poner en marcha una política fiscal a todos los niveles que incentive la natalidad». La entidad seguirá trabajando «de manera intensa». «Llevamos años en esta pelea y es verdad que, en los últimos meses, hemos intensificado nuestras propuestas y nuestras reuniones. Esperamos que el Gobierno vaya más allá».