«Basta con no hacer en la red lo que no harías en la calle»

«Basta con no hacer en la red lo que no harías en la calle»

El fiscal Jorge Bermúdez, en una reciente charla impartida a padres y madres en la casa de cultura de Okendo.El fiscal Jorge Bermúdez, en una reciente charla impartida a padres y madres en la casa de cultura de Okendo.

 

Decenas de padres y madres escuchan sin pestañear al fiscal de Criminalidad Informática de Gipuzkoa, Jorge Bermúdez, en el centro cultural de Okendo, en Donostia. En la tercera charla formativa organizada por la federación de asociaciones de familias numerosas de Euskadi Hirukide, el experto informa a los presentes sobre los peligros que sus hijos corren en internet, todos ellos «con efectos reales».

¿Cómo es posible que lo que sucede en la red tenga consecuencias en el día a día de una persona? Desde que se despierta hasta que se acuesta, la extorsión on line está presente en cualquiera de las víctimas de ciberacoso. A pesar de no estar físicamente presente, con las nuevas tecnologías, el acosador persigue a su víctima desde cualquier punto del planeta.

Quizá por eso, por la «abstracción» de estos casos, «los delitos que se cometen en internet se nos escapan. La tecnología está cada vez más presente en nuestras vidas y aunque nosotros no estemos en internet, internet sí puede afectar a nuestra vida», incide Bermúdez. Ante estas palabras el silencio se apodera de la sala. Los padres y madres que observan al fiscal esperan una explicación. Están preocupados.

A pesar de que «a los niños de ahora les llamamos ‘nativos de internet’, no nacen sabiendo utilizar estos dispositivos. Los integran en su rutina porque están en todas partes, pero eso no quiere decir que los sepan usar bien», explica el fiscal. Por eso, resulta «fundamental» ser conscientes de los peligros que existen una vez se pulsa el botón de encendido del ordenador.

Una de las mayores amenazas es el concepto de identidad digital. «Los chavales creen todo lo que les dice la otra persona por internet. Cuando el acosador obtiene lo que quiere, imágenes subidas de tono, por ejemplo, entran en acción las amenazas. Este tipo de gente es una obsesionada del control y siempre va a buscar el dominio sobre la otra persona», advierte Bermúdez. Las penas de los atentados contra la intimidad pueden ir hasta los siete años de cárcel.

Cuidado con la ‘nube’

«Aunque nosotros no estemos en internet, internet sí afecta a nuestras vidas»

«Para evitar problemas se recomienda «tener el antivirus al día y no revelar contraseñas»

Otra de las cosas a tener en cuenta en lo referente a la red es la ‘nube’ de internet, porque «no existe. Es el ordenador de otro señor. Puede ser Google, Amazon… No importa el nombre. Son otros ordenadores, los archivos no están por ahí flotando en la nada». Por eso, porque «la ‘nube’ es un ordenador», esta es vulnerable al ataque de un ‘hacker’.

El fiscal, ante todo, hace hincapié en que «lo que hacen los adolescentes algo habitual. Cualquiera lo puede hacer. Vivimos en una época de exhibición personal». Frente a estas palabras la sala se alborota, pero Bermúdez recuerda el caso del vídeo de Olvido Hormigos. «Hasta entonces este tipo de cosas no eran impunes, porque a ella nadie le robó el vídeo. Lo envió ella y otra persona lo subió. Fue traición», explica el fiscal guipuzcoano.

Mientras que el envío de imágenes entre individuos sin consentimiento propio ya es delito, la suplantación de identidad aún no está regulada. «No es delito como suplantación, aunque sí se considera delito la falsificación de documento. Esto se puede dar no solo con la creación de una nueva cuenta en las redes sociales, sino que el acosador entre a la cuenta de nuestros hijos mediante la intrusión en sistemas informáticos», asegu el fiscal.

«Cámaras en cuarentena»

Las caras de los padres y madres allí presentes son, en ocasiones, un cuadro. Nadie quiere imaginarse a sus hijos en esas situaciones. Por eso, Bermúdez no duda en dar unos consejos aplicables tanto a los mayores como a los jóvenes.

Todos deben tener cuidado en la red. Hay que cuidar la integridad moral, pero «también la de la máquina. El antivirus tiene que ser legal y puesto al día, el sistema operativo tiene que estar actualizado y hay que tener precaución con los wifis abiertos».

Pero no solo eso, lo que parece simpleza a priori, puede ahorrar muchos problemas, así las cosas, el experto recomienda «tener las cámaras en cuarentena. Con privacidad alta, tapando la cámara con alguna pegatina. También tenemos que tener cuidado con las redes sociales, tener todas las opciones de privacidad altas activadas».

Es importante ser consciente de la realidad, pero «no hay que caer en el alarmismo. Basta con no confiar en nadie que no esté presente físicamente y no revelar información personal ni contraseñas, así como no hacer cosas que no haríamos en mitad de la calle», señala Jorge Bermúdez.