Madre de María, Paula, Romitha y Clara, Judit Mascó, además de Top Model y haber desfilado para los mejores diseñadores en todo el mundo, ha presentado programas de televisión, hecho cine, publicidad y escrito libros…
“Creo que un país que no sepa capitalizar el potencial de la mitad de su sociedad (las mujeres), está desaprovechando sus recursos humanos y poniendo en peligro su potencial competitivo”
¿Viendo tu extenso currículum… qué experiencia global extraerías de tu trayectoria profesional?
Ser modelo es y ha sido mi profesión y con ella he crecido y he aprendido mucho. Cualquier profesión, y también la de modelo, que a priori suena tan superficial, sirve como herramienta para sacar provecho de la vida; los sacrificios y los éxitos bien llevados son parte de mis experiencias vitales. Las cosas buenas y las no tan buenas al final han hecho de mí la persona que ahora soy. Y yo diría que ¡no me ha ido tan mal! Me gusta mi trabajo, es lo que siempre quise hacer y luché por ello, así que me siento satisfecha y sobretodo agradecida.
Decidiste formar tu familia y tener a tus primeras hijas cuando estabas en tu cima profesional… ¿fue una decisión difícil de tomar?
No, porque era lo que queríamos. Lo tenía claro, lo deseaba, y mis sentimientos iban por delante de mi trabajo o mis éxitos profesionales. Creo que hay etapas y momentos para todo. Dejé las pasarelas al quedarme embarazada de mi primera hija y seguí y aún sigo en contacto con el mundo de la moda a través de la fotografía y la publicidad. Ser madre es lo más maravilloso. Cambié en muchas cosas. Básicamente dejé de ser el centro de atención y preocupación, para dar prioridad a mis hijas. Ha habido un importante cambio en la escala de valores en mi vida. La maternidad es una experiencia preciosa que minimiza cualquier otra cosa.
¿Tuvisteis claro desde el principio que queríais formar una familia numerosa?
No fue algo tan planificado, pero sí es verdad que siempre tuvimos mucha ilusión por tener hijos, y como fue una preciosa experiencia, nuestras tres primeras hijas llegaron muy seguidas. La cuarta, Clara, fue buscada para completar la ya familia numerosa que éramos.
Pero compaginar tus quehaceres profesionales, con tu vida familiar, no habrá resultado fácil en muchos momentos…
Con la maternidad, gestionar el tiempo tanto profesional como el personal, no resulta nada fácil. Mis hijas ahora son mi prioridad, pero lucho cada día para encontrar tiempo para mí y para mi relación de pareja, que no se puede descuidar nunca. Mi trabajo me gusta mucho, cada vez más, y me siento realizada haciéndolo. El tiempo es como un rompecabezas; hay sitio para muchas piezas, solo hace falta encajarlas bien, y no querer colocar más piezas de las que caben. He descubierto que con un poco de organización se puede llegar a todo y que todo tiene su medida.
¿Crees que es viable hoy en día tener éxito profesional y a la vez ser madre?
Es viable, pero bastante complicado y es un esfuerzo por parte de la madre. Dar prioridades en ciertas etapas de la vida, es lo que he hecho yo. Pero también tengo que decir que mi trabajo no tiene tanto mérito como el de tener que cumplir con un horario de oficina cada día, jornada entera. Yo puedo en un momento dado renunciar a un trabajo y, al ser autónoma, no pasa nada. Pero es cierto que las mujeres que trabaja-mos y queremos estar con la familia, no lo tenemos nada fácil. Ha habido momentos, en que compaginarlo todo era de locos, pero la organización en pareja y la ayuda de los abuelos o la canguro, ha sido impres-cindible. Para mí, “pasar la agenda” cada semana, para decidir quién se ocupará de qué, es básico para funcionar bien como familia.
Y también pienso que el éxito profesional es compatible con ser madre, si en la relación de pareja hay amor. Si hay amor hay comprensión y apoyo, y la pareja funciona. Y eso no sólo ayuda, si no que motiva a seguir trabajando. Porqué lo peor que nos puede pasar a las mujeres trabajadoras, es sentirnos culpables por trabajar.
Para las familias que tenemos tantos hijos y cargas familiares, ¿consideras que se han ido dando pasos en la corresponsabilidad en el matrimonio?
Creo que cada vez más los maridos son conscientes de que es cosa de todos, pero aún está mejor valorado el trabajo del hombre, independientemente del sueldo que pueda aportar a la familia. Es decir, si uno de los dos tiene que renunciar al trabajo laboral al tener hijos, siempre se da por hecho que será la mujer (si los hijos enferman, o si hay que ir a comprar…).
Creo que un país que no sepa capitalizar el potencial de la mitad de su sociedad (las mujeres), está des-aprovechando sus recursos humanos y poniendo en peligro su potencial competitivo. Y esto lo digo, po-niendo como ejemplo a los países nórdicos, modelo aplicable para reducir las desigualdades. De los países comunitarios, éste es el quinto con menor grado de igualdad entre hombres y mujeres.
Se habló hace un tiempo de si sería efectivo regular por ley el reparto de tareas domésticas en la pareja y yo no sabría decir de qué manera, pero sí es cierto que puede ser inquietante la falta de igualdad y respon-sabilidad entre hombres y mujeres. Afrontar y regular el reparto equitativo de las responsabilidades familia-res, regular la igualdad de salario a igual trabajo, presencia femenina en el mercado laboral, despenalizar las bajas maternales…buffff!!! Mucho que hacer, y no parece que vayamos en buen camino.
Y Judit Mascó, ¿cómo se definiría como madre?
¡Complicado contestar! Hago lo mejor que puedo e intento poder dar lo mejor de mí para ellas, mis hijas. Pero no es fácil. Soy de las que pienso que la educación familiar funciona por la vía del ejemplo, no la de los discursos y grandes teorías. Por eso creo que dar un clima de afecto familiar es muy importante. También dedicarles tiempo de calidad y transmitirles sentido común. ¡Me esfuerzo! ja, ja…. ¡pero cada día cuesta más!
Como Top Model, habrás tenido que ejercitar mucho la disciplina, la constancia, el esfuerzo…, ahora cuáles son los principales valores que estás transmitiendo a tus hijas?
Creo que es muy importante poder transmitir valores de solidaridad, respeto y generosidad a los niños, y que puedan ser conscientes, de que la suerte de la que gozan por haber nacido en esta parte del planeta, no es igual para el resto de los niños. Despertar en ellos el interés por los demás, la empatía, me parece importante
¿Cuál es el mejor momento del día o de la semana con tu familia?
La hora de la cena, ya que es el único momento en el que estamos todos juntos y podemos comentar sin prisas cada uno de nosotros nuestras cosas, compartirlas y muchas veces debatirlas. Y evidentemente los fines de semana, sobre todo si salimos fuera para disfrutar de alguna actividad en la naturaleza. Los paseos o excursiones en la montaña, alguna tarde de fin de semana preparando un pastel en la cocina, viendo una peli en familia con las palomitas a mano o simplemente un día de playa y sol. Cualquier buen plan puede resultar un buen momento!
¿Consideras que nuestra sociedad está preparada o adaptada para las familias numerosas? Y nuestros gobernantes… ¿valoran o hacen justicia con nuestro colectivo?
No. De hecho aprovecho este espacio tan adecuado para pedir más sensibilidad y ayudas a las familias numerosas. Es un problema subir en un taxi todos juntos, es un gasto demasiado alto ir toda la familia junta al teatro o al cine….A nosotros nos encanta viajar con las niñas, pero no es fácil hacerlo con cuatro hijos (hoteles que no están preparados, transportes públicos, aviones donde te piden un adulto que acompañe a un menor…) y un largo etcétera, que tendríamos que reivindicar. Entiendo que ahora en estos momentos de crisis sea complicadas las ayudas, pero si pido facilidades.¡ A veces parece que estorbemos!
En un momento como el que estamos padeciendo, ¿podrían hacer más por las miles de familias con hijos que están inmersas en la crisis económica y laboral?
Por supuesto las familias numerosas inmersas en la crisis, deberían ser tomadas muy en cuenta, y recibir todas las ayudas necesarias para que los hijos puedan seguir comiendo en los comedores escolares y estudiando a través de becas. Siempre he pensado que nuestros hijos son nuestro futuro, por lo que siempre deberían ser por justicia una prioridad. Y ése es sólo un aspecto a tener en cuenta, ya que los problemas son muchos más… Por ejemplo, entiendo que debería ser justo un gran descuento en el gasto de la luz, el agua, gas, etc. ya que siendo muchos en casa el gasto puede ser enorme.
Es conocida tu colaboración activa con diferentes ONGs, ¿consideras necesaria la labor que se hace, en este caso, desde Hirukide en la defensa de las familias numerosas?
Por supuesto! Ya que sólo unidos y trabajando en colectivo se consiguen las cosas. Que nos escuchen, que respeten nuestros derechos, lograr objetivos comunes y sensibilizar, ya que nosotras las familias que tenemos más hijos aportamos mucho a la sociedad y eso parece que no siempre se nos reconoce.
Y vuestra labor desde Hirukide, está siendo un éxito por los logros que ya estáis consiguiendo en las bonificaciones municipales y ventajas en diferentes aspectos como seguros, teléfono, ocio, textil, etc. y sobre todo por la sensación de unión y fuerza que desprende Hirukide. De hecho desde aquí quiero felicitaros.
Para terminar, creo que a muchas madres de familia nos gustaría saber cuál es tu truco para ser una buena profesional, una buena madre y además conservarse “tan en forma”…
¡No hay trucos! Pero si creo que estar bien con uno mismo y con la pareja y dedicar horas y buscar espa-cios de diversión personal con amigos, en familia y disfrutar de las cosas buenas que nos da la vida, teniendo una actitud positiva, hará que nos sintamos mejor. Respetarse a uno mismo y a los demás, crear un ambiente de amor en casa, disfrutar del afecto auténtico y de las cosas que valen la pena, buscar la felicidad haciendo felices a los demás, valorar lo que tenemos, vigilar nuestra autoestima….. Buf, al final os diré para resumir una de las frases que más me gusta: La vida es un misterio a vivir, no un problema a resolver”. Vivir, no sobrevivir. Eso te hace sentir “en forma”.
