EL CORREO. Las Juntas eliminaron en mayo, con el apoyo del PNV y PSE, la posibilidad de bonificar a este colectivo después de hacerlo durante 13 años
La primera en señalar la pieza fue la directora del catastro. «Ser familia numerosa es un derecho subjetivo, inherente a la persona, que no debería aplicarse en un tributo sobre un bien físico, como es el IBI y la vivienda. Los ayuntamientos tienen otras vías», declaró en una entrevista en estas páginas a principios de mayo. Cuando el debate llegó unas semanas después al siempre solemne pleno de Gernika, la apoderada jeltzale Janire Bijueska calcó sus argumentos, que fueron criticados con matices desde las bancadas de EH Bildu, Podemos y el PP. Los dos socios que sustentan al Gobierno, PNV y PSE, sumaron sus votos e hicieron valer su mayoría. Los ayuntamientos perdían la potestad de bonificar hasta un 90% en el IBI a las familias numerosas tras trece años haciéndolo.
Hirukide, la federación que engloba a las familias numerosas vascas –solo en Bizkaia son más de diez mil–, fue la primera en poner el grito en el cielo. Recordaron sus evidentes necesidades de «un mayor espacio en las viviendas, no por lujo sino por necesidad, porque conviven allí más personas». Y señalaron la incongruencia del razonamiento foral porque la nueva norma de IBI «mantiene otras bonificaciones subjetivas, como la de tener un garaje de concesión municipal». Su queja pública, tenía pocos visos de prosperar. «En este asunto el Gobierno no ha dado ninguna alternativa», aseguró el portavoz del PP en las Juntas, Javier Ruiz. Tampoco prosperó la idea de introducir cambios, como vincularla a la renta e incluir a otros colectivos, tal y como pedían EH Bildu y Podemos.
Medidas de compensación
Desde el próximo 1 de enero ningún ayuntamiento tendrá bonificación en el IBI para las diez mil familias numerosas que hay en Bizkaia. La norma foral cierra la posibilidad de rebajas hasta del 90%, como las que se mantenían hasta ahora en 77 localidades, con diferentes porcentajes y siempre vinculadas a la vivienda habitual. Hirukide escribió a todos los alcaldes. Tuvieron contacto con varios pero, a día de hoy, ninguno ha puesto en marcha otras ayudas que ayuden a paliar la subida en la factura del principal impuesto municipal. Tocaron entonces una de las última puertas, la del Ararteko. Y la resolución de Manuel Lezertua, experto jurista, ha sido «todo un espaldarazo». El defensor del Pueblo vasco reclama «un proceso de reflexión al departamento foral de Hacienda» y que apoye a las familias con «medidas de compensación de costes». Su dictamen no elude la comparativa «con otros países europeos de nuestro entorno», con mejores políticas públicas. También pide que «con carácter previo a la toma de decisiones, se estudie el impacto» de las medidas fiscales y señala la necesaria «homogeneización» del marco vasco. «Gipuzkoa y Álava mantienen las bonificaciones y es, por tanto, un factor de desigualdad en Bizkaia», recordó ayer la directora de Hirukide, Natalia Diez-Caballero, que confía en que «las Juntas lo retomen y se puedan recuperar las bonificaciones» porque el apoyo actual es «insuficiente». Un portavoz de Hacienda prefirió ayer no hacer valoraciones «porque se trata de una norma foral tramitada y aprobada en las Juntas».