La familia Ulloa Benavente, formada por Iasone, Juanma y su hija June de tres años y medio, se convirtió en numerosa hace 16 meses gracias a la llegada de sus trillizos Nora, Jon y Mare. Para conocer su experiencia nos han abierto las puertas de su casa en Donosti.
“Este verano nos hemos ido de vacaciones y hemos tenido descuentos gracias a Hirukide”
“En todos los momentos de la vida es importante tener la familia al lado pero en estos casos, es imprescindible”
¿Cómo resumiríais este último año y medio con la llegada de los trillizos?
I: Una locura, es como tener una guardería en casa… (risas).
J: En general, muy bien. Lo hemos pasado muy bien, pero la verdad es que es básico tener ayuda.
I: Sí, en todos los momentos de la vida es importante tener la familia al lado pero en estos casos, es imprescindible. Sin ellos al principio hubiese sido una locura, es decir, imposible.
De todas formas, tu Juanma ya contabas con cierta experiencia al ser padre de dos hijos mayores… ¿os ayudó esto a llevarlo mejor?
J: Sí, yo tenía experiencia, pero mis hijos ya son mayores y la verdad es que había muchas cosas que se me habían olvidado. La parte de cambiar pañales, el biberón, el no dormir… Realmente la que más nos ha ayudado a recordar todo ha sido nuestra hija de tres años y medio, June.
Y la propia June, ¿cómo ha afrontado un destronamiento de semejante calibre…?
J: Es una de las cosas que más nos ha preocupado, ya que ha tenido muchos celos. Es que era la primera biznieta y nieta para la familia de mi mujer, la primera sobrina… y de repente se vio destronada por tres niños y ha sido muy duro para ella y para nosotros. Prácticamente, en todo este verano no ha pisado la casa y se ha quedado donde mi suegra porque no quería venir. Es la que peor lo ha pasado, la verdad.
J: Ahora ya empieza a jugar con ellos… y les muestra cariño pero claro, al principio le costó aceptar la situación, pero ¡ahora ya muy bien!
Y en el día a día, ¿cómo os desenvolvéis?
J: Lo más complicado fue al principio, los primeros meses, porque al ser prematuros tenían que comer cada tres horas aunque no se despertaran y como a partir de las diez de la noche estábamos solos en casa hasta el día siguiente, por la noche sólo dormíamos una hora. Es que eran tres biberones que nos costaban dos horas hasta que se dormían con lo cual dormíamos una hora y seguido a darles de comer otra vez… así que hemos estado durmiendo una hora durante los cinco primeros meses.
I: Ahora, a las mañana tenemos una chica que nos ayuda a llevar a los trillizos a la guardería, mi hermana nos ayuda con June para llevarla a la ikastola y nosotros vamos a trabajar. Cuando volvemos por la tarde a casa, suele venir mi madre y otra hermana mía para ayudarnos con las meriendas, los baños, las cenas… en definitiva, con todo. Así que nos las apañamos mejor que antes, pero con mucha ayuda.
Y como médicos, ¿además tenéis guardias…?
I: Sí, sobre todo yo. Juanma menos porque trabaja en el ambulatorio, pero yo que trabajo en el hospital, me paso varios días al mes 24 horas fuera de casa debido a las guardias. Entonces esos días suele venir mi madre y mi abuela a casa para ayudarle a Juanma…
J: La dificultad era mayor antes que ahora. El hecho de que los trillizos hayan empezado la guardería nos facilita las cosas, pero claro, todo está organizado de antemano porque June, por ejemplo, va a una ikastola que está cerca de donde vive mi suegra precisamente para que pueda ir alguien a buscarla. Y los trillizos como han empezado la guardería comen antes, con lo cual la merienda se la damos nosotros solos,… pero todo esto siempre con ayuda.
En cuanto a la manutención, teniendo en cuenta la época de crisis que estamos pasando… ¿cómo lo estáis llevando?
J: Tuvimos la suerte de que cuando nacieron los trillizos todavía estaba vigente el cheque-bebé.
I: Y además, habíamos leído en foros que si enviabas cartas a determinados establecimientos te enviaban cosas a casa (tanto de ropa como de comida) y eso nos ayudó bastante. Pero ahora, como dicen que cada vez hay más trillizos ya no dan tantas ayudas de este tipo y eso que realmente es en estos momentos cuando más lo necesitas porque llega el cambio de tiempo y hay que renovar toda la ropa por tres.
J: Lo que más nos está auxiliando son las ayudas que tenemos gracias a Hirukide, los descuentos que nos hacen en todo tipo de sectores… eso viene muy bien! A simple vista parece poco pero son cosas que ayudan y se agradece un montón, de hecho este verano nos hemos ido de vacaciones y hemos tenido descuentos gracias a Hirukide.
¿Y cómo consideráis las ayudas y medidas que se ofrecen desde las instituciones?
I: En su momento, cuando nacen y te dan todos los cheques, lo llevas bien porque tienes que comprar muchos pañales, el cochecito, la furgoneta, etc., pero los días van pasando y al final esas ayudas te sirven para las primeras semanas o meses…
J: Lo que más me gustaría es que pensasen un poquito más en el futuro y no tanto en el momento del nacimiento. Los años pasan y hay que tener en cuenta que hay que escolarizarlos y a medida que van creciendo, todas las necesidades que tienen son más caras y son necesidades que se multiplican por tres.
I: Sobre todo deberían dar ayudas en el tema escolar: para libros, mochilas, guarderías, etc.
J: Además, lo que queremos es que reconozcan a las familias, que se impliquen de verdad y que muestren la importancia que tienen las familias en la sociedad, sobre todo las numerosas.
Y para vosotros ¿qué ha supuesto la existencia de asociaciones como Hirukide? ¿Qué es lo que más valoráis?
J: Pues todo. Las ayudas y patrocinadores que colaboran ofreciendo descuentos vienen muy bien. Y las reivindicaciones que realizáis a favor de las familias numerosas son imprescindibles para que podamos salir adelante.
I: Yo es que ya era miembro de Hirukide como hija porque en mi casa éramos seis hermanos y ya conocía un poquito su labor. Por eso, cuando nos enteramos de que íbamos a tener trillizos nos hicimos socios enseguida. Además, creo que es muy importante que la gente que tiene una problemática o una situación como la nuestra pueda compartir su vivencia con otras personas porque tienen la misma sensibilidad que tú y te entienden.
¿Y echáis algo en falta por parte de la asociación?
J: No, nada en especial. Todo lo que sea “dar la vara” a las instituciones para que se den cuenta del gasto que supone mantener a una familia numerosa me parece bien.
I: A mí me gustaría que recibiesen más ayudas aquellas personas o familias que no tienen recursos suficientes para sacar adelante a una familia numerosa.
J: En definitiva, que las ayudas que recibimos sean adecuadas a la renta de cada uno porque no todo el mundo tiene las mismas posibilidades.
Para resumir, ¿qué significa para vosotros ser familia numerosa? ¿Qué aportaciones creéis que realizáis a la sociedad?
I: Yo creo que es muy importante formar una familia porque nuestros hijos son el futuro. Sobre todo, quizás lo que más me gusta de ser familia numerosa son los valores tan importantes que les aportamos y que en otras familias igual pasan más desapercibidos, como la generosidad, la paciencia, el compartir, el no ser caprichosos… Cosas que aprendí en mi casa, donde todos tuvimos que aprender que no había juguetes propios, que teníamos que ser pacientes, el no ser egoísta… en definitiva, que no es posible tener todo lo que queremos. Creo que eso, hoy en día, es muy importante.
¿Cuál es el mejor momento del día?
I: Jajaja… si soy egoísta,… cuando los niños están durmiendo y podemos descansar.
J: Y también el tiempo que disfrutamos de ellos: ver cómo crecen, se ríen, etc.
¿Y el peor momento del día?
J: Antes quizá en comida al darles la fruta, pero ahora no tenemos ningún momento malo.
I: La verdad es que no lo tenemos. Ahora mismo estamos en el mejor momento.
¿Un deseo?
J – I: Que sigan creciendo y criándose como hasta ahora. Que sigan igual de sanos y de felices.
¿Unas vacaciones perfectas?
J: Quizá unas vacaciones los dos solos.
I: Cuando tienes tantos hijos se echa de menos la vida de pareja, pero yo preferiría irnos todos juntos de vacaciones.
