
La autoestima: factor clave en la formación personal de los niños
La autoestima es un tema que despierta cada día un gran interés, no solo de psicólogos como también de madres y padres. Es una preocupación presente en muchas casas y conversaciones. Y eso se puede entender por la relación que está teniendo la autoestima con problemas como la depresión, anorexia, timidez, abuso de drogas, y otros. Algunos expertos afirman que una baja autoestima puede llevar a una persona a tener estos problemas, mientras que una buena autoestima puede hacer con que una persona tenga confianza en sus capacidades, no se deje manipular por los demás, sea más sensible a las necesidades del otro, y entre otras cosas, que esté dispuesto a defender sus principios y valores.
Lo ideal sería que los padres no se preocupasen solamente en mantener una buena salud física a sus hijos y que mirasen más por la salud emocional de los mismos. La autoestima es una pieza fundamental en la construcción de una efectiva infancia y adolescencia.
La autoestima es la conciencia de una persona de su propio valor, el punto más alto de lo que somos y de nuestras responsabilidades, con determinados aspectos buenos y otros mejorables, y la sensación gratificante de querernos y aceptarnos como somos por nosotros mismos y hacia nuestras relaciones.
La autoestima es un elemento básico en la formación personal de los niños. De eso dependerá su desarrollo en el aprendizaje, en las buenas relaciones, en las actividades, y por qué no decirlo, en la construcción de la felicidad. Cuando un niño adquiere una buena autoestima se sentirá competente, seguro, y valioso.
Estímulos para la autoestima infantil
Consejos para incentivar la autoestima de los niños
La autoestima se construye a través de un proceso de asimilación e interiorización desde el nacimiento pero que puede modificarse a lo largo de toda la vida. Se genera por la imagen que los otros nos dan de nosotros mismos y por el valor que demos a esta imagen. Es durante la infancia y adolescencia donde la autoestima crea una marca profunda, porque es en estas etapas cuando nos encontramos más vulnerables y flexibles.
una buena autoestima hará con que el niño
experimente efectos positivos como la confianza,
el ánimo, el interés y el placer de aprender
y de realizar sueños
Considerando que una buena autoestima hará que el niño experimente efectos positivos como la confianza, el ánimo, el interés y el placer de aprender y de realizar sueños, es necesario que sea edificada desde que el niño sea apenas un bebé. El afecto y el cariño entre el recién nacido y sus padres, pueden ser considerados una guía de la autoestima. El bebé debe sentirse querido y abrazado por lo que es. Por eso, en el caso de que tu bebé haya nacido con alguna anomalía o deformación física, cuide para que él no sienta tu preocupación. Acércate aún más a él. El niño que no siente que es valorado por sus padres, puede desarrollar el miedo de ser abandonado.
Lo mismo se debe hacer, por ejemplo, cuando el niño, en la escuela, es "rotulado" como el malo, el trasto, el impertinente, y lo único que hacen, compañeros y alumnos, es dejarle de lado, discriminarle, haciéndole sentir marginado y rechazado por todos. Esta postura no le ayudará en absoluto. Lo que sí creará es una baja estima en el niño que, en poco tiempo, podrá llevarle al fracaso escolar.
Cada niño es único, y en el caso de que quieras construir una buena autoestima en tu hijo, debes considerar factores como su temperamento, sus habilidades, debilidades, mecanismos de defensa, deseos, y su nivel cognitivo.
Cómo estimular la autoestima
Para fomentar la autoestima del niño puedes seguir algunos pasos que contamos a seguir:
1- Incentiva el desarrollo de las responsabilidades del niño. De una manera positiva, crea algunos compromisos y exija, en un clima de participación e interacción, su cumplimiento por parte del niño.
2- Da la oportunidad al niño a que tome decisiones y resuelva algún problema.
3- Refuerza con positivismo las conductas del niño. Por ejemplo, cuando él haga los deberes, o recoja sus juguetes, o se cambie de ropa solo, dígale con cariño y de forma efusiva ¡qué mayor eres!, ¡Gracias por ayudarme!, o ¡lo has hecho muy bien! En algunas casas y colegios, este refuerzo se hace a través de pequeños premios.
4- Ponga límites claros a tu hijo, enseñándole a prever las consecuencias de su conducta. Ejemplo: "Si no recoges tus juguetes, no irás al cine". Y que no haya vuelta atrás.
5- Enseña a tu hijo a resolver sus propios problemas y a aprender de sus errores y faltas, de una forma positiva. Por ejemplo, si el niño no alcanza una buena nota en una asignatura escolar, anímale a estudiar más y a prepararse para superarse en el próximo examen. De nada adelantará culpabilizarlo. El niño debe sentir que un error puede ser convertido en un aprendizaje y, consecuentemente, que podrá arreglarlo si emplea más esfuerzo.
6- Deja de lado las críticas que nada construye. Los insultos no favorecerán a la autoestima del niño. En lugar, por ejemplo, de decir "eres un desordenado, tienes tu cuarto como una basura", mejor decir "No me gusta ver tu cuarto tan desordenado, me pone muy triste". Así, estarás demostrando que lo que a ti te disgusta es el desorden del cuarto, no el niño.
Las frases positivas deben ser usadas a menudo en la educación
Presentamos las frases para una motivación positiva y la consecuente relación con la actitud promovida. Las frases positivas deben ser usadas a menudo. Delante de otras personas aumentan su eficacia; pero, en presencia de hermanos pueden producir celos.
Es recomendable sorprender a los hijos haciendo algo bien y decírselo. Una vez al día es un buen objetivo.
MOTIVACIÓN POSITIVA (frases dichas por los padres a sus hijos)- ACTITUD PROMOVIDA (en los hijos)
Has sido capaz de hacerlo – Soy capaz
Muy bien. Yo sé que lo harás – Soy capaz
No dudo de tu buena intención – Soy bueno
Juan tiene un alto concepto de ti – Juan es mi amigo
Si necesitas algo, pídemelo – Amigo
Sé que lo has hecho sin querer – No lo repetiré
Estoy muy orgulloso de ti – Satisfacción
Sabes que te quiero mucho – Amor
Yo sé que eres bueno – Soy bueno
Te felicito por lo que has hecho – Alegría, ganas de mejorar
Qué sorpresa más buena me has dado – Alegría
Cuando me necesites, yo te ayudaré – Amor
Así me gusta, lo has hecho muy bien – Satisfacción
Noto que cada día eres mejor – Ganas de serlo
Creo lo que me dices, sé que lo harás – Confianza
Sabes que quiero para ti lo mejor – Amor
Tú te mereces lo mejor – Satisfacción
No esperaba menos de ti – Confía en mí
Puedes llegar a donde tú quieras – Puedo hacerlo
Seguro que las próximas notas son mejores – Estudiar más
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